La Fundación Formació i Treball ha gestionado 23.286 toneladas de textil durante el 2022
La entidad apuesta por la sensibilización de la ciudadania para conseguir uno de los objetivos: la reducción del residuo textil.
La Fundación Formació i Treball, miembro de la Cooperativa Moda re- (impulsada por Cáritas) y de la Cooperativa Roba Amiga (impulsada por entidades sin ánimo de lucro del ámbito catalán) ha gestionado 23.286 toneladas de textil durante el 2022, un 10% más que el 2021, contribuyendo así al ahorro de 582.150 toneladas de ahorro de Co2. Toneladas que han sido recogidas directamente o en colaboración con entidades sociales, tratadas por Formació i Treball en alguna de sus 5 plantas. El triaje se ha llevado a cabo especialmente en la nave de Sant Esteve Sesrovires, la más grande y avanzada tecnológicamente del sur de Europa.
En concreto, el proyecto textil abraza una vertiente social que, bajo un modelo de economía solidaria, verde y circular consigue generar puestos de trabajo sostenibles en el tiempo para personas en situación de vulnerabilidad -impacto económico-, resuelve necesidades poco cubiertas de ropa para estas personas -impacto social-, reduce la generación de residuos -impacto medioambiental-, i a su vez, favorece propuestas de proximidad en el y desde el territorio -impacto comunitario-.
La circularidad en el mundo del textilse ha convertido en la gran esperanza para la industria de la moda. La solución implica desafiar la forma líneal en la que se fabrican las prendas de ropa y nos relacionamos con ellas, repensando todos los elementos de la cadena de producción, para promover un uso racional de los recursos y alargar el ciclo de vida del textil, reduciendo así el impacto medioambiental de la segunda industria más contaminante del mundo.
Las tres R: Reutilizar, Reciclar y Reducir:
El valor diferencial del proyecto de Formació i Treball, además de fomentar el reciclaje, la reutilización y la reducción de este residuo es convertirlo en una oportunidad tanto laboral para personas en riesgo de exclusión social, como para el medioambiente. Es decir, bajo la cura de la “casa comuna”, siempre trabajamos para el bienestar de las personas.
Por otro lado, Formació i Treball destina el 55% de la ropa que gestiona a su reutilización en su estado. A partir de los diferentes controles de calidad, esta ropa se canaliza para la entrega social (dirigida a familias vulnerables) y a la venta en 136 establecimientos de consumo ético por toda España, así como en países en vías de desarrollo. En el caso de Cataluña se distribuye a través de los vente comercios propios Botiga Amiga amb Moda re- y de los siete puntos de venta a los hipermercados Alcampo. Espacios de venta modernos y competitivos que rompen con el estigma del consumo de la ropa usada a su vez que gestionan la entrega social para estas personas vulnerables a través de los Programas de Entrega Social que también impulsa la Fundación. Esta confluencia de col·lectivos consigue dignificar las entregas y mantener el anonimato de las familias atendidas, dando así el drecho a escojer la ropa en función de sus gustos y preferencias (más allá de la necesidad), y normalizando esta entrega como una compra más.
Formació i Treball promueve procesos de reciclaje post consumo para estas prendas de ropa que ya tienen un desgaste excesivo y a las cuales no se les puede dar una segunda vida. Estas se destinan al aprovechamiento de fibras en la hilatura de nuevos productos textiles o producción para la industria del automóvil, aislamiento térmico, acústico, etc. Estos procesos de reciclaje post consumo, suponen el 40% del material textil que gestiona la Fundació a las diferentes plantas de tratamiento textil.
En esta ámbito, desde hace dos años hemos introducido una actividad de alto valor añadido: la tecnología Fibersort, implantada en Sant Esteve Sesrovires, con la colaboración de la Cooperativa Moda re-, y que permite la identificación precisa de la composición de las fibras de la ropa. La iniciativa responde a una necesidad, hasta ahora no cubierta, de los operadores de reciclaje, los cuales tienen dificultades en el reaprovechamiento de fibras provinientes de prendas de ropa que ya se habían usado (post consumo) por no poder determinar con exactitud cuál era su composición.
Así pues, la implantación de este sistema ha permitido aumentar el porcentaje de tejido dirigido al reciclaje y participar en unos sesenta proyectos de investigación a nivel mundial o preparación de ropa para su reciclaje con la tecnología de espectroscopia de infrarojo cercano (NIR), pionera en el sur de Europa.
Del volumen triado, un 5% son artículos diversos entre los cuales hay impropios, plástico y papel, y textil no reciclable. Una parte de este volumen se clasifica y reaprovecha, mientras que otra resulta residuo, se dirige a procesos de cogeneración electrica y calorífica.
Finalmente, Formació i Treball impulsa la reducción del residuo textil gracias al proyecto de educación ambiental “Tejiendo un pensamiento sostenible” que realiza con la colaboración de la Cooperativa Moda re-. La sensibilización es la mejor herramienta para conseguir reducir la generación de residuo textil y despertar conciencias entorno a este ámbito. En este sentido, se han elaborado 6 unidades didácticas orientadas a personas a partir de los tres años hasta edades adultas, con variedad de contenidos y actividades para cada etapa con la finalidad de fomentar el compromiso ambiental y social del alumnado; cabe destacar que solo durante el 2022 esta material ha impactado sobre 1.300 personas.
La cura del planeta, el bienestar de las personas
El proyecto de Formació i Treball, además de reducir los residuos, promueve la justicia social en un contexto dónde la tasa de exclusión afecta al 29,1% de la población, afectando directamente a 2.258.000 personas (Informe FOESSA 2022). El rasgo diferencial de la actividad es el impulso de la creación de puestos de trabajo dirigidos en exclusiva a personas en riesgo de exclusión social. Personas que a partir de su contratación en la empresa de inserción, además de aprender un oficio, desarrollan una actividad de protección y cura del planeta.
La generación de puestos de trabajo sostenibles para el medioambiente hace que durante el 2022, 399 personas realizaron un itinerario de inserción sociolaboral en la línia textil de la Fundación, desde la recogida de ropa a los contenedores, selección y clasificación de esta, hasta la distribución en establecimientos comerciales de economía social y solidaria.
El objetivo de los contratos de inserción –mínimo 6 meses y prorrogable hasta los 3 años-, y por lo tanto, de las empresas de inserción, es el de especializar a las personas en una profesión para acceder a un puesto de trabajo. Es decir, una herramienta que haga de puente y que, además de dar estabilidad laboral y económica a las personas, las prepara para posteriormente dar el salto al mercado laboral ordinario. Así, una vez la persona hace el salto al mercado laboral, su puesto de trabajo es ocupado por otra persona en riesgo de exclusión que inicia su itinerario.