Noticia17/10/2020

Día de la Alimentación: urgen medidas estructurales para garantizar el derecho a la alimentación de las familias vulnerables

Es un momento óptimo para tomar conciencia de las causas estructurales que impiden a miles de familias en nuestro país acceder de forma plena a este derecho.

 

La pandemia a la que estamos asistiendo ha intensificado las situaciones de vulnerabilidad que vivían muchas familias en España y que afecta seriamente el acceso a derechos básicos como el de la alimentación.

Para Cáritas, la celebración, el 16 de octubre, del Día Mundial de la Alimentación, es un momento óptimo para tomar conciencia de las causas estructurales que impiden a miles de familias en nuestro país acceder de forma plena a este derecho, el que la actual pandemia añade nuevas dificultades.

Como alertaba la entidad hace unos meses a la luz de los datos obtenidos de la Consulta sobre el impacto de la Covidien-19 a las Cáritas Diocesanas de toda España, desde la irrupción de la emergencia sanitaria y la declaración del estado de alarma el pasado mes de marzo, se constata un incremento del 77% en el número de demandas de emergencia recibidas por el conjunto de la red confederal de Cáritas en toda España y de un 57% en el de personas atendidas.

En esta misma línea, la garantía del acceso al derecho a la alimentación tiene también un origen estructural, como son el paro y la precarización laboral, o los precios abusivos en alquileres / compra de viviendas (el 33.6% de las familias en situación de exclusión tienen gastos excesivos en la vivienda). Esto significa que, una vez descontados los gastos fijos de vivienda (alquiler o hipoteca, suministros, etc.), estas familias en situación vulnerable y con recursos limitados quedan por debajo del umbral de pobreza, con un acceso a la alimentación muy precario.

No tener asegurado el derecho a la alimentación tiene repercusiones importantes para toda la población: el 17,9% de las familias han reducido los gastos en alimentación, el 7,7% no llevan una dieta adecuada y el 36% han reducido la su gasto en vestido y calzado, todo ello derivado de problemas económicos.

En Cáritas, y a pesar de la situación generada por la aparición de la Covidien-19, apuestan por el derecho a la alimentación, alineada con una política estructural y coordinada que facilite el cambio de estructuras. Se trata de dignificar la respuesta a esta necesidad básica de tantas familias y que por Cáritas se basa en estas claves: dignidad; autonomía y libertad; inclusión y sostenibilidad.