Noticia10/06/2021

Cáritas aumenta en un 45% las ayudas para cubrir las necesidades básicas

La generosidad en las donaciones de personas y empresas ha incrementado un 13%

 

«No hubiera pensado que vendría a hacer cola en Cáritas …». Esta es una de las frases más escuchadas a Cáritas en los últimos meses y que reflejan bien la situación social y económica de muchas personas y familias a raíz de la pandemia del Covidien-19. Lo constató el director de Cáritas Diocesana de Tarragona, Salvador Grané, en la presentación de la Memoria anual 2020, jueves día 3 de junio. Ganas explicó que «la pandemia ha agravado la vulnerabilidad de muchas personas que ya se encontraban en situación de exclusión social pero también ha incorporado otros que no estaban y que se han encontrado de manera repentina, en parte por la pérdida de los puestos de trabajo ». El director de Cáritas Diocesana de Tarragona constató que la solidaridad ha disfrutado -la generosidad en las donaciones de personas y empresas ha incrementado un 13% -pero muchas personas han quedado al margen de las ayudas.

Por su parte, el arzobispo Juan Planellas, presidente de Cáritas Diocesana de Tarragona, manifestó un «agradecimiento profundo a todo el trabajo que realiza Cáritas en la vertiente social, especialmente en el último año» y destacó su acción educadora para mediante la solidaridad, la conciencia crítica y el espíritu comunitario velando para promover un verdadero y eficiente «servicio de caridad».

La coordinadora de Acción social, Goretti Cebrián, explicó que durante el año 2020, en la archidiócesis de Tarragona, se incrementó la actividad en un 33% atendiendo 8.236 hogares, beneficiando un total de 21.329 personas. Cebrián explicó que Cáritas impulsa actualmente 9 programas que aglutinan 30 proyectos sociales. De entre estos programas, lo que ha aumentado más su actividad -hasta un 45% de media-, ha sido el de ayudar a cubrir las necesidades básicas, sobre todo al inicio de la emergencia sanitaria.

Por otra parte, Pilar Ribas, coordinadora del Observatorio Social de Cáritas, explicó que «en cuanto al perfil de las personas atendidas, un 70% han sido mujeres» y subrayó que «este indicativo nos muestra una feminización de la pobreza ». También explicó que las familias con mayor riesgo de vulnerabilidad son las que tienen hijos a cargo -el 55% de las personas atendidas- y que se mantienen bastante estables los porcentajes de las personas solas -el 21% de las personas atendidas-.

Finalmente, Ribas constató que la pandemia ha agravado la precariedad laboral, ha incrementado el número de hogares que viven sin ningún ingreso y ha dificultado el acceso a la vivienda y que se ha hecho evidente la exclusión como consecuencia de la aceleración en la digitalización.